enero 06, 2009

Sin azucar, gracias.

Y es que así tenía que ser.

Un par de copas y una cámara,
un saludo amable y una conversación formal.

Un par de amigos nuevos.

De vuelta a la casa sin más compañía
que uno mismo.

Las sonrisas quedaron atrás,
la plática "intelectual".

La posibilidad de un reencuentro
remoto en el "hubiera".

Otra porción individual
que se diluye como la leche en el café.

enero 03, 2009

Noche de enero

Sigue siendo enero, como sigo siendo yo, como sigue siendo esta maldita tristeza, como sigue siendo esta necedad que se empecina en no dejar de hablarme a patadas ciegas a la noche.

Noche que no sabe a nada, ni a luna ni a estrellas, ni a luces de calle con sus autos desvelados y el perro que ladra al fondo, porque tampoco la noche le sabe.

No saber, como quien nunca escuchó aún cuando todos murmuraban a gritos casi ensordecedores el secreto por todos conocido menos por uno, porque uno es el número más ignorante que hay.

-El eterno engaño con su amiga la paranoia y el sueño que no llega, que no nos deja cerrar el ojo sin ponernos imágenes que no queremos ver-

Es enero y aún no comienza el año nuevo porque todo sigue igual, porque nada ha cambiado, porque mis palabras no han mejorado, ni mis ganas de seguir pensando.

enero 01, 2009

Una última plegaria

No se quien seas o donde estés, solo espero que guardes un lugar en tu corazón para mi.
No soy nadie especial ni diferente, simplemente soy un corazón que espera, y espera...

No se quien soy yo tampoco, ni lo que esperar
soy uno más y nada más.

Pero sigo siendo yo.

Aún no me he vendido ni me he dado por vencido,
espera por favor, aguanta un poco más

y ven a mi.